Los que me siguen por aquí o me conocen bien saben que Stephen King es uno de mis autores favoritos desde hace mucho tiempo. Muchas de sus novelas fueron llevadas al cine en más de una ocasión, eso sí, con resultados desiguales y las mejores, para mí, son las que parten de historias que no son exactamente de terror. De todas las que aparecieron por la gran pantalla me quedo con “Cuenta conmigo”, “Cadena Perpetua” y “La milla verde” (curiosamente todas basadas en cuentos o un relato corto); sin olvidar “Misery” o “Carrie” (la primera versión). Viene esto a cuento de que hoy voy a dejar un par de cosas sobre una serie de televisión que sigue una de las últimas novelas de este autor. En julio de 2010 comenté aquí la que en aquel momento era una de sus últimas novelas (podéis leer el comentario aquí) y que salvo por un final algo decepcionante me había gustado bastante. La novela era “La cúpula”, planteamiento original, desarrollo en su línea habitual, personajes de todo tipo y una serie de situaciones que hacían la lectura muy entretenida y bastante interesante. Solamente me había decepcionado un poco el final, pero creo que tampoco era una historia fácil de rematar de una forma que fuera satisfactoria para todos los lectores. Al final de aquel comentario decía que estaban preparando una serie televisiva basada en la misma, pues es sobre esa serie sobre la que os dejaré unas letras en mi comentario de hoy.
La novela era larga y daría para la típica serie de 24 episodios que suelen hacer por los Estados Unidos. Al final se ve que la primera temporada tuvo un cierto éxito y la extendieron a tres, terminando definitivamente con esta última, que la cosa no daba para mucho más. La primera es del 2013 y la última de este mismo año y, para mí, fue de una línea más o menos decente a ir bajando poco a poco. Todavía no terminé de verla, ando ahora por la mitad de esa tercera y definitiva temporada y quiero ver cómo acaban la historia, aunque me está decepcionando un poco.
La primera temporada seguía en líneas generales bastante la novela. Como es normal en estos casos cambiaban algunas cosas, eliminaban otras y añadían algún personaje que no aparecía en la novela, pero en general podías reconocer la mayor parte de la novela en la misma. Como dije en el comentario y suele pasar con este tipo de historias de King, lo mejor eran los personajes y la relación que se iba estableciendo entre ellos, sobre todo entre los protagonistas y los antagonistas. La historia era bastante original. De repente el pueblo de Chester Mill´s se encontraba atrapado bajo una cúpula impenetrable. Dentro de ella todos los habitantes del típico pueblo americano que tanto le gusta al autor como algunos otros que estaban de paso por allí en aquel momento. Así la historia se trazaba sobre todo en una confrontación entre el alcalde el pueblo, Big Jim Rennie, y uno de los que pasaban por allí, Dale Barbara. A su alrededor una buena serie de personajes relacionados con el uno o el otro que iban tomando partido en una situación que se prometía difícil y complicada. Nadie podía entrar y nadie podía salir y la cúpula jugaba un poco con todo el pueblo, dando y quitando cosas sin que hubiese una explicación lógica. Al final un remate que como dije no me convenció demasiado, algo caótico y no demasiado dentro de la tónica general del relato, pero bueno, no era fácil. Como en otros casos las razones del por qué de la existencia de la cúpula quizá eran lo de menos, pero lo importante era cómo iban reaccionando los distintos personajes a las situaciones que se iban planteando. Cómo iban intentando solucionar los problemas y cómo íbamos descubriendo las razones que impulsaban a cada uno a actuar como lo hacía. La primera temporada seguía bastante bien esta historia y creo que lo mejor sería haberlo hecho y no dejar cosas en el aire para poder hacer una segunda, sobre todo cosas que en absoluto aparecían en la novela original. Sigo sin entender por qué estas historias de King, que son tremendamente cinematográficas, no respetan las líneas generales marcadas por el autor y se empeñan en cambiar cosas que a veces no cuadran o no pintan nada dentro del relato. En los casos en los que él no participa del guión puedo entender que lo hagan, porque el autor ya no lo controla, pero en los que sí participa, como es el caso de esta, aún lo entiendo menos.
El final de la primera dejaba muchas cosas en el aire, lógicamente había que intentar mantener el interés, y me puse a ver la segunda. Los primeros capítulos no estaban mal, aún se podía ver en ellos la línea argumental de la novela, aunque era evidente que estaban ampliando cosas para poder extenderla más. Pero en cierto momento pasó a no tener casi nada que ver con ella, y ahí creo que se estropeo un poco, o bastante. Eso no quiere decir que perdiera el interés, pero ya no era lo que yo quería ver. Vamos, que creo que se le fue un poco de las manos. King sigue apareciendo como asistente de los guiones y aún podemos ver su mano en el desarrollo de la historia, pero aún así muchos de los aciertos del autor se perdieron en su paso a la televisión. Es más, en uno de los primeros capítulos de esta segunda temporada aparece el propio Stephen King tomando algo en la barra de la cafetería del pueblo.
Y si la segunda ya me pareció algo prescindible, qué decir de la tercera. Perdonando la expresión en esta ya se les fue la pinza del todo. No voy a contar nada porque supongo que habrá gente que la siga y querrá verla, aunque de momento creo que aquí no se ha estrenado, porque yo me la estoy viendo en versión original subtitulada. Me da que pronto la estrenarán. Pero aunque quiero saber cómo la van a terminar y algunos personajes me siguen gustando la verdad es que me está costando un poco. La cúpula sigue ahí, pero la historia que desarrolla cuadra un poquito, pero poco, con la historia de la novela. Algunos de los pocos personajes nuevos que aparecen parecen metidos con calzador y chirrían un poco. La forma de comportarse de otros que ya conocíamos pues tampoco me gusta demasiado. Y además parece una especie de refrito de la novela original con algunos clásicos del cine de ciencia-ficción y terror de toda la vida más algunos otros de lo que se suele llamar serie B. Si la vemos no como una adaptación de la novela, sino como otra cosa, no está mal, pero aún así me está decepcionando un poco. Ya me huelo un final de esos que me dejan frío y mandándolos a freír espárragos.
De todos modos la serie no está mal. Está bastante bien hecha y la situación bastante bien reflejada. Los actores no son demasiado conocidos, algunos de cara y de verlos en otras series y dejan el pabellón en un plano medio. De todos modos por encima de todos ellos destaca uno que la verdad es que se come la pantalla cada vez que sale. En la novela había un personaje que aún no siendo el “bueno” de la historia para mí era el más destacado por todo lo que hacía y cómo se comportaba. La verdad es que era el más jugoso de todos y estabas siempre esperando a ver qué hacía o por dónde salía página tras página. Era Big Jim Rennie, el alcalde del pueblo, siempre dispuesto a hacer lo que fuera para poder destacar y quedar por encima de los demás. Pues en la serie este personaje la verdad es que está muy por encima de todos los demás y su interpretación también. El actor que lo encarna será una cara muy conocida para los aficionados a las buenas series, Dean Norris, el inolvidable cuñado de Walter White, el químico fabricante de anfetaminas de “Breakin Bad”. Tampoco están mal los otros dos actores principales de la historia, Mike Vogel como Dale Barbara y Rachelle Lefevre como Julia Shamway, pero para mí quedan por detrás del anterior.
Lo dicho, no está mal pero aunque me repita no entiendo por qué cuando una historia está bien planteada, bien desarrollada, con buenos personajes y buenas situaciones (que es lo que hace Stephen King en sus novelas) vienen unos guionistas de cine y televisión y se empeñan en cambiar esas cosas y convertir muchas de las originales historias de este autor en mal cine que no soporta casi ni una crítica benévola. Cierto es que muchas de sus novelas llevadas al cine no están entre las mejores y son de gama media, pero cuando las llevan al cine las convierten casi en infumables o peor incluso. Lo malo es que también lo han hecho con algunas de las que no están nada mal. Hace poco leí que otra de sus últimas historias también será convertida en serie de televisión. Pues miedo me da porque además de sus últimas novelas es la que más me gustó, me refiero a “22/11/63”, original, entretenida y bien escrita como sus mejores relatos. Vamos a cruzar los dedos y esperar que sean fieles al texto original.
Nosotras la dejamos antes de que terminara la tercera temporada. Ya no podíamos más, se les había ido del todo la olla.
ResponderEliminarPues para lo poco que os quedaba terminadla, sobre todo por constatar que esa ida de olla aún podía ir mucho, pero mucho más allá, convirtiéndose en un refrito de otras películas clásicas y algunas series que no voy a mencionar por no dar pistas, me costó, pero la terminé, no sé cómo King se presta a seguir con ese tipo de guiones, una pena
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